Lomo
Seleccione una de las partes del cerdo para continuar...
Cabeza
La cabeza de cerdo es una zona de carne gelatinosa. Entera se suele preparar en salazón o asada. La oreja, la careta y el morro son excelentes a la plancha y para dar sabor a guisos.
Ver recetas >Carrillera
Pieza magra que corresponde a las partes carnosas que se encuentran a uno y otro lado del hocico y bien guisadas resultan muy tiernas, jugosas y melosas.
Ver recetas >Magros
Picado, en filetes o en dados para brochetas, este corte incluye la papada, una carne tierna y muy gustosa que puede prepararse cocida entera, asada o rellena.
Ver recetas >Cabecero
Es una pieza especialmente magra que se suele usar para filetes a la plancha, rebozados o para asar al horno.
Ver recetas >Lomo
Es la parte más magra del cerdo, cada una de las dos piezas de carne que hay junto al espinazo y bajo las costillas. Suele tener una forma cilíndrica.
Ver recetas >Costilla
Este corte contiene las partes óseas de la caja torácica, alternando carne y hueso. Puede cocinarse de muchas formas diferentes.
Ver recetas >Solomillo
Es una carne magra y la más apreciada del cerdo, a pesar de su reducido tamaño. Resulta muy jugosa y sabrosa.
Ver recetas >Paleta
Se corresponde con el muslo de la extremidad delantera, que puede usarse para hacer carne picada, estofada o filetes. También puede curarse como el jamón.
Ver recetas >Manos
Son un corte muy popular en la cocina tradicional. Pueden cocinarse fritas o en salsa. Su carne es jugosa y gelatinosa por su alto contenido en colágeno.
Ver recetas >Jamón
Corresponde con cada una de extremidades posteriores. Se emplea especialmente para secarlo y consumirlo curado, así como para preparar jamón cocido.
Ver recetas >Pies
Así como las manos del cerdo, esta carne es magra y muy gustosa. Contiene proteínas y colágeno, beneficiosos para el organismo.
Ver recetas >